Pasos a seguir si estás decidido a divorciarte
Cuando has tomado la decisión de separarte o divorciarte es fundamental estar preparado para los desafíos que puedan surgir. Esto incluye contar con asesoría legal desde el principio, incluso cuando se está apenas considerando como opción.
El camino hacia el divorcio puede ser emocionalmente agotador y lleno de obstáculos, pero si estás informado apropiadamente se puede manejar mejor.
¿Qué problemas pueden surgir en un divorcio?
No todos los casos son iguales, pero los siguientes son algunos de los problemas más comunes que se pueden presentar:
La vivienda
Imagina que te oyes diciendo, la casa es mía y mi pareja no quiere irse. Esta situación puede volverse tensa y complicada, sobre todo si hay mucha diferencia en las finanzas de los miembros de la pareja o si todavía quedan sentimientos. También puede ocurrir que alguno de los dos esté tratando de retrasar lo inevitable o queriendo sacar mayor provecho del que corresponde.
En situaciones como esta es muy importante buscar asesoramiento legal, estar muy bien informado de los derechos que corresponden y no tomar acciones legales por mano propia.
Desacuerdos en la división de bienes
La división de bienes es uno de los temas más delicados en un divorcio. Puede haber diferencias significativas en la percepción del valor de los activos o en lo que cada quien aportó para las finanzas de la pareja.
Para llegar a un acuerdo justo, te aconsejamos lo siguiente:
- Inventario de bienes. Haz una lista detallada de todos los bienes, desde la casa y los automóviles hasta los muebles y las cuentas bancarias.
- Valuación profesional. Considera contratar a un tasador o un abogado especializado en derecho de familia como los de Divorcieitor para evaluar los activos de manera imparcial.
- Negociación. Busca un terreno común. A veces, ceder en ciertos aspectos puede allanar el camino hacia un acuerdo.
Los hijos
Si tienes hijos menores de edad, su bienestar debe ser una prioridad. La custodia, las visitas y la manutención son temas esenciales que hay que hablar desde el principio y sin egoísmos. Las siguientes son algunas recomendaciones:
- Comunicación abierta. Habla con tus hijos sobre la situación de manera honesta y comprensiva. Igualmente con tu pareja, deja claras tus expectativas y oye con comprensión.
- Acuerdo de custodia. Trata de llegar a un acuerdo sobre la custodia que beneficie a los niños y les permita mantener una relación cercana con ambos padres.
- Profesionalismo. Considera la mediación o la asesoría de un profesional para resolver disputas relacionadas con los hijos.
Consejos para un divorcio amistoso
Un divorcio amistoso es aquel en el que ambas partes colaboran para resolver los problemas de manera civilizada. Y que de esa colaboración surge un documento escrito que contiene los acuerdos a los que han llegado en todos los aspectos de la separación o divorcio.
Las siguientes son algunas sugerencias para lograrlo:
- Asesoría legal. La asesoría de un abogado de familia es indispensable. Este profesional es quien debe redactar el acuerdo al que lleguen los cónyuges y además asegurarse de que dicho acuerdo sea adecuado.
- Comunicación respetuosa. Mantén la calma y evita los ataques personales. No inicies conversaciones mientras estás alterado. La comunicación respetuosa es esencial para llegar a acuerdos. No uses calificativos y concéntrate en llegar a los acuerdos que son necesarios.
- Mediación. Considera la mediación como una alternativa al litigio. Un mediador imparcial puede ayudar a encontrar soluciones equitativas. Si hay mucho conflicto es la mejor opción.
- Prioriza el bienestar de los hijos. Recuerda que los niños también están pasando por un proceso difícil. Trabajen juntos para proteger su bienestar emocional.
- Documenta todo. Guarda registros de las conversaciones, acuerdos y decisiones. Esto puede ser útil en caso de disputas futuras.
Un divorcio amistoso puede ser igual de doloroso que cualquiera, pero es una elección sabia, que mitiga un poco el problema. Siempre es preferible separarse con respeto y consideración hacia el otro, además, un divorcio amistoso es más fácil y barato. Recuerda que la paz mental y la armonía son más valiosas que tener la razón.
