Cómo hacer la dieta de la NASA para perder peso
Desde finales de 2017 y principio de 2018 comenzó a circular por las redes el nombre de una nueva dieta conocida como «la dieta de la NASA». Quienes la promueven aseguran que se trata de un régimen alimenticio diseñado por científicos. El mismo, según dicen, es practicado por astronautas. Sin embargo, la relación entre la agencia norteamericana y dicha dieta es poco conocida. De hecho, no existe vestigio de que fuera promovida por la institución ni ahora ni al inicio de los vuelos espaciales.
Ahora bien, ¿a qué se debe la fama de este régimen alimenticio? Más allá de si fue diseñada por científicos y expertos en nutrición, esta dieta es sumamente conocida porque su práctica conlleva a perder 10 kilos en poco más de una semana. Es una dieta hipocalórica. En muchos casos puede poner en riesgo la salud de quienes la llevan a cabo y traer consigo numerosas consecuencias en el organismo. No obstante, su práctica se ha hecho famosa. Veamos de qué se trata y cómo hacerla.
¿En qué consiste la dieta de la NASA?
La dieta de la NASA es un régimen alimenticio cuya duración tiene un máximo de 13 días. Durante este periodo se debe reducir el consumo calórico, que por lo general está por encima de las 2000 kcal. En algunos días este será de 700 kcal, mientras que en otros de 500 kcal.
Esto se traduce en la pérdida de 10 kilogramos, e incluso más.
Para lograr esto la dieta de la NASA exige una serie de aspectos esenciales:
- Consumir 2 litros de líquido diario. Puede ser agua, café, té u otra infusión, pero en ningún caso de incluirse azúcar.
- Eliminar todo tipo de azúcar. Esto incluye aquellas que vienen en las frutas. Su consumo está prohibido.
- No cocinar con aceites, mantequilla o margarina.
- Suprimir cualquier tipo de grasa adicional, como la que se halla en las salsas, los frutos secos,
- Solo comer tres veces al día.
- No sustituir los alimentos que aparecen en el menú.
- Al momento de cocinar, solo se debe optar por hacerlo al horno, al vapor o hervido.
- La dieta solo puede durar 13 días.
Menú propuesto en la dieta de la NASA
Desayunos
Lunes: solo café o té.
Martes: solo café o té.
Miércoles: una rodaja de pan, más café o té.
Jueves: una rodaja de pan, más café o té.
Viernes: café o té, más una taza de vegetales hervidos.
Sábado: solo café o té.
Domingo: solo café o té.
Almuerzos
Lunes: ensalada verde y tres huevos hervidos.
Martes: ensalada verde y un filete de carne de ternera o pescado.
Miércoles: ensalada, más tortilla y verduras.
Jueves: zanahorias hervidas, entre cinco y siete lonjas de jamón y un huevo hervido.
Viernes: filete de pescado o carne de ternera, zanahoria hervida o ensalada verde.
Sábado: filete de pollo, verduras al horno y ensalada.
Domingo: filete de carne o ternera grande y ensalada.
Cenas
Lunes: ensalada verde y filete de pollo.
Martes: ensalada verde, huevos hervidos.
Miércoles: ensalada verde, entre tres y cinco lonjas de jamón cocido.
Jueves: ensalada verde, yogurt sin azúcar.
Viernes: filete de pollo, verduras y yogurt.
Sábado: filete de carne de ternera o pescado y ensalada verde.
Domingo: filete de pollo y verduras.
En cada caso, las comidas se acompañan con agua; además, esta debe ingerirse entre cada comida para completar los dos litros. Nunca las bebidas tendrán azúcar y, en lo posible, se debe evitar cocinar con aceites. Una buena opción para sustituirlo es el vinagre de manzana.
Consecuencias de la dieta de la NASA
La restricción calórica que se genera con la implementación de esta dieta es elevada. Como se ve, no hay consumo de frutas y en el caso de los cereales es casi mínimo. Si bien esto puede ayudar a rebajar 10 kilogramos, sus consecuencias en la salud son muchas. Las personas pueden sufrir síntomas como debilidad, fatiga e incluso mal humor, ya que la alimentación también repercute en el estado ánimo y otros aspectos psicológicos.
Por otra parte, es muy común que al finalizar la dieta se sufra de un efecto rebote. Este consiste en la obtención de resultados totalmente distintos a los esperados una vez se finaliza una dieta hipocalórica como esta. La razón es que, al consumir pocos alimentos durante el régimen, es común que una vez finalizada se regrese a la ingesta diaria. El organismo procesará con mayor lentitud y esto generará más peso que el obtenido anteriormente.